Antes que nada, es importante mencionar a qué refieren las siglas SEO: Search Engine Optimization, que traducido al español significa “Optimización de motores de búsqueda”, pero también se conoce comúnmente como “Posicionamiento en Buscadores”.
Para
comprender mejor de qué se trata, se parte de la premisa de que a la
hora de realizar una búsqueda en internet, en la mayoría de los casos,
las personas no ven los resultados más allá de la primer página o
incluso de los primeros títulos que aparecen al poner en el buscador las
palabras claves. Es aquí donde entra a funcionar SEO, que lo que
logra es posicionar a la web para que esté dentro de esta primer
página. Es decir, se brinda un servicio a los propietarios de la Web,
que consiste en que ésta se encuentre en la posición más alta posible
de resultados de búsqueda para una o varias palabras concretas.
Esto se logra mediante diversas actividades encaminadas a optimizar la estructura de la Web
y su contenido, tanto a nivel interno como externo, como por ejemplo
actualizar la página con información original de calidad, enlazar
internamente las páginas del sitio de manera ordenada y clara para dar
paso al buscador por las diferentes secciones del sitio en forma
ordenada, mejorando su visibilidad. También buscar que otras páginas
Web con temáticas afines a las propias enlacen con la Web. Estas son sólo algunas de las acciones simplemente mencionadas a modo de ejemplo.
En resumen, el SEO
consiste en la utilización de diversas técnicas con el fin de mejorar
la posición de la página Web en los resultados de los buscadores para
unos términos de búsqueda concretos, y esto se lleva adelante porque
mientras mejor sea el posicionamiento, mayores son las posibilidades de
que el sitio sea visitado por los usuarios.
Escrito por: Irina Belotti
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